*Afirma Alejandra Zúñiga, doctora en Derecho, integrante del Proyecto Anillo SOC 180007.
Una visión complementaria a la que tienen las y los investigadores de las ciencias sociales, es lo que aporta la abogada Alejandra Zúñiga, doctora en Derecho, al Proyecto Anillo SOC 180007 “Cultura política y postdictadura: memorias del pasado, luchas del presente y desafíos del futuro”, en el que participa como investigadora titular desde el año pasado.
Señala la abogada que en este año de trabajo en el equipo “he aprendido harto de mis colegas, ha sido súper bueno para mí escucharlos, muy iluminador. Es toda una forma nueva para mí de entender la sociedad y de ver los conflictos sociales, más allá del Derecho, en que tenemos una forma muy específica de trabajar, muy concreta, con ciertos cánones, con ciertas reglas que son mucho más rígidas que las que utilizan quienes trabajan en los ámbitos de las ciencias sociales, de psicología, sociología o trabajo social”.
Pensando en la coyuntura actual, añade Alejandra Zúñiga, es importante abrir las visiones, “porque la construcción de una nueva Constitución nos obliga a quienes trabajamos en el Derecho a hacer algo a lo que sí están acostumbrados los cientistas políticos, los sociólogos, los psicólogos, que es escuchar a las primeras fuentes. Porque cuando uno trabaja desde la ciencia jurídica, a lo más ve encuestas, ve estudios sobre algo, pero no tiene la oportunidad de leer o escuchar directamente a las fuentes. Desde el Derecho uno siempre trata de racionalizar, de dar un fundamento que sea intersubjetivamente válido, que de alguna forma pueda ser transformado en una idea abstracta. Por lo tanto, tiene que haber mucha fundamentación detrás de eso, y la sola experiencia individual no es suficiente, porque la experiencia personal de alguien puede ser muy interesante, pero con eso no puedo construir una política pública: las políticas públicas se construyen con megadatos. La forma en que mis colegas del Anillo ven los conflictos sociales y cómo los veo yo desde el Derecho, se pueden complementar y enriquecer mucho. Yo me he visto muy enriquecida por el trabajo en el Anillo y creo que hacemos un buen equipo”.
Mirada de futuro
Detallando en qué consiste su participación en el Proyecto Anillo, Alejandra Zúñiga señala: “Yo estoy vinculando el trabajo que se hace en relación con los temas de Derechos Humanos y memoria, con lo que es el futuro de la problemática de esos temas en la nueva Constitución. Trabajo sobre las distintas formas de afrontar esa problemática, que pueden o no tener una vía constitucional o una vía legislativa”.
La idea es, añade, pensar “cómo enfrentar esa problemática hacia el futuro, cómo darle algún tipo de perspectiva a largo plazo. Sobre todo para efectos de reconocer todas las deudas que todavía existen en materia de Derechos Humanos, que están asociadas a lo que fue la dictadura militar, tanto la dictadura misma como todas las normas, todas las leyes que fueron construidas dentro del espacio de la dictadura y que regulan actualmente nuestro país”.
En este sentido, destaca que “hay un gran trabajo por hacer; por ejemplo, muchas personas que trabajan en el tema de memoria consideran la justicia transacional una deuda que tuvo su origen en la dictadura militar y en la construcción que se hizo en ese momento de lo que era la sociedad. Uno de mis trabajos más importantes de investigación ha sido en el tema de derechos sociales, en general los temas de redistribución de ingresos, redistribución de recursos sociales, lo que es justicia distributiva. Esto más allá de lo que es el derecho penal, que normalmente se asocia a la violación de Derechos Humanos; ahora ya se amplía el campo y empieza a incorporarse todo lo que dice relación con la desigualdad social”.
Específicamente, Alejandra Zúñiga investiga junto a las doctoras Carla Cubillos y Ximena Faúndez sobre temas de justicia distributiva y memoria, y junto a los doctores Fuad Hatibovic y José Manuel Gaete también en justicia distributiva, pero asociados al género. “Estamos, por ejemplo, viendo cuáles son las demandas y las visiones que la juventud tiene en la actualidad en materia de igualdad de género, y cómo puede responder a esas demandas la nueva Constitución”.
Destaca la investigadora que “yo nunca había trabajado los temas de memoria, y es interesante poder darles una mirada de futuro; no sólo estar mirando el pasado, sino ver de qué forma podemos construir desde esa dinámica que fue la dictadura militar y todas sus consecuencias y tratar de construir desde ahí hacia el futuro”.
Presencia femenina
Un elemento que valora especialmente la doctora Zúñiga es el alto número de mujeres que integran el Proyecto Anillo: “Es excelente, y es rarísimo, sobre todo a este nivel, porque un Anillo es un tremendo logro de investigación. Y es importante porque creo que los temas de género es inevitable que los traspasemos al trabajo, porque son los temas que tenemos las mujeres”.
Añade que para ella este trabajo viene a complementar el que venía desarrollando desde el Derecho, ya que permanentemente se ha orientado a las mujeres. “Yo soy una convencida de que a medida que el mundo vaya siendo formado más por mujeres en los espacios de poder, va a mejorar. Soy una convencida de que eso es algo que va a ocurrir. Es cosa de ver, ahora en la pandemia, cuáles fueron los gobiernos que mejor lo hicieron: son todos gobiernos de mujeres, ahí es donde las prioridades se estudiaron bien, se analizaron bien y se puso a la gente por sobre otras cosas. Eso no lo voy a ver yo: mis hijos, mis nietos van a ver un mundo donde las mujeres van a estar mucho más involucradas en los espacios de poder y realmente se van a ver los cambios”.
Alejandra Zúñiga Fajuri es abogada y licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Diego Portales. Doctora en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid. Académica de la Escuela de Derecho de la Universidad de Valparaíso e investigadora del Centro de Investigaciones de Filosofía del Derecho y Derecho Penal (CIFDE) de la UV. Es autora de diversos libros y artículos sobre filosofía política, derechos humanos y bioética. Ha desarrollado proyectos de investigación en el área de la justicia distributiva y el derecho a la protección de la salud, entre otros.