Decano Juan Sandoval: “A cuatro años de su creación, la Facultad de Ciencias Sociales es ya una comunidad y no un mero agregado de tres escuelas”
El próximo jueves 21 de diciembre, el profesor Juan Sandoval Moya (52) dejará oficialmente el cargo de decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso. Lo hará tras una gestión de cuatro años dedicada a instalar y dotar de voz e identidad propias a este novel plantel, que fue creado en 2019 con la integración de las escuelas de Psicología, Sociología y Trabajo Social.
“En realidad son casi cinco, porque asumí en marzo de ese mismo año, designado por la Junta Directiva de la UV. En noviembre fui electo por el claustro y al mes siguiente comencé a ejercer en propiedad el cargo”, precisa el académico, doctor en Psicología Social.
Sandoval decidió no repostularse, ya que desea retomar a plenitud las actividades académicas e investigativas y también escribir. Asegura que se va satisfecho con la labor que realizó como primer decano de la Facultad de Ciencias Sociales y especialmente agradecido del apoyo que durante todo ese tiempo le brindaron tanto sus colegas —en particular quienes junto a él integraron el equipo directivo del plantel— como el personal administrativo y, por cierto, las y los estudiantes de la que ahora es conocida a nivel institucional simplemente como “la Facso”.
“Siento que este proceso ha avanzado de gran manera, gracias al compromiso y dedicación de muchas y muchos. En primer lugar, deseo reconocer públicamente a María Angélica Cruz, cuya labor como secretaria de Facultad hizo posible que el proyecto de creación e instalación de esta unidad se pudiera materializar. Asimismo, quiero destacar el rol que jugaron en él los directores de escuela de entonces: Gonzalo Lira, Sonia Reyes y Elena Salum, y más tarde Daniela Jara y Mauricio Ureta. También valoro el papel que desempeñaron las respectivas jefaturas de carrera y las diferentes coordinaciones académicas que ejercieron las profesoras Mónica Iglesias, Ketty Cazorla, Sara Salum y el profesor Héctor Berroeta, que en distintos momentos asumieron importantes protagonismos; el de la coordinadora administrativa, Marisol Rojas, y el de las secretarias Jimena Campos y Jacqueline Valencia. Sin ellas ni ellos las buenas cosas que hemos hecho habrían sido mucho más difíciles o imposibles de implementar”, admite la autoridad saliente.
Balance de objetivos y aportes
Al repasar el grado de cumplimiento de los objetivos que se trazó al inicio de su gestión, Juan Sandoval afirma que el balance es positivo.
Por una parte, explica que durante su período se pudieron sentar las bases para dotar de un sello común a docentes y estudiantes que provenían de tres escuelas cuyo origen no compartían, los cuales, en su opinión, ahora se sienten parte de una unidad académica cualitativamente distinta. A la vez, argumenta que esto hizo posible que esta nueva Facultad contribuyera al mejor cumplimiento de la misión de la UV, aportando al desarrollo de los territorios y a las reflexiones de este tiempo, mediante iniciativas y proyectos de carácter interdisciplinario orientados a la identificación de problemas nuevos o antiguos que fueron abordados desde perspectivas renovadas.
“Lo que nosotros nos propusimos fue lograr instalar, desplegar y legitimar un proyecto impulsado por el exrector Aldo Valle y, posteriormente, por el actual rector Osvaldo Corrales y el prorrector Christian Corvalán, que debía dar prueba de que era una buena idea desde el punto de vista institucional, no sólo en sus tres claustros sino que en el resto de esta comunidad universitaria. Para ello teníamos que generar espacios de convergencia y trabajo colaborativo, entre académicos y estudiantes de áreas disciplinarias que siendo parte de un tronco común no estaban unidas. Objetivamente, creo que al día de hoy aquí existen espacios de asociatividad e iniciativas que hemos logrado implementar en conjunto. Este es un proceso gradual, que ha ido madurando, pero, en definitiva, me parece que a cuatro años de su creación, esta Facultad es ya una comunidad y no un mero agregado de tres escuelas. Ya empieza a haber aquí una identidad y un cierto sello particular”, enfatiza Sandoval.
En tal sentido, el decano agrega que la creación de la Facultad de Ciencias Sociales ha supuesto una mejor condición de desarrollo para las tres escuelas que la conforman, lo que a su juicio queda en evidencia en que todas ellas pasaron de cuatro o cinco años de certificación a un nivel de excelencia de seis y siete años.
En cuanto a su aporte al ámbito disciplinario, Sandoval asegura que —poco a poco— este plantel ha logrado transformarse en un referente. No obstante, reconoce que es innegable que el avance en este plano estuvo determinado en extremo por la pandemia, que obviamente provocó que muchas de las iniciativas en las que él y su equipo habían resuelto avanzar en cierta dirección o con cierta velocidad no lo hicieran en el sentido ni con el empuje deseados.
“A pesar de esto, logramos desarrollar la capacidad para instalar temas e incidir en ámbitos que son propios de nuestra disciplina: de preferencia en estudios de género, de memoria, de infancia y de salud mental. Dos iniciativas puntuales en este contexto me parecen dignas de destacar: nuestra Escuela de Verano, creada en 2020 como un espacio en que la Facultad abre sus puertas a egresados, empleadores y público en general para discutir temas de interés, y la creación de un fondo interno para apoyar la investigación y los estudios colaborativos e interdisciplinarios, para el que ya se han abierto tres convocatorias que han permitido financiar una docena de proyectos. Su objetivo es aportar recursos a académicos que no acceden en forma regular a iniciativas de investigación externa, para que puedan avanzar en sus respectivos trabajos, y dar continuidad a ciertos proyectos que ya han dejado de percibir fondos externos. Esto, entre otras cosas, ha hecho posible que en nuestra Facultad haya aumentado significativamente la publicación de artículos en indexaciones WoS y Scopus, que son muy importantes”, asevera el decano.
La experiencia estudiantil
En lo que respecta a la situación de las y los estudiantes de la Facultad, Juan Sandoval expresa que ellos también han sido fundadores de este plantel, con todos los desafíos y ventajas que esa condición implica y, por tanto, es legítimo que muchos sientan que todavía hay temas en los que el avance debe continuar y ser más profundo.
Sin embargo, plantea que durante su gestión como decano se logró implementar un proceso de movilidad entre las Escuelas de Psicología, Sociología y Trabajo Social que ha permitido a sus respectivos alumnados compartir asignaturas y participar en cursos transversales electivos.
“Estas experiencias han contribuido a generar espacios de conocimiento y colaboración que han hecho posible que las y los estudiantes empiecen a desarrollar una identidad como integrantes de la Facso. Una muestra puntual de esto son las iniciativas que se desarrollan en el Parque El Litre. Me parece que estas experiencias formativas han ido transformando a este plantel, lo han hecho más complejo, diverso, integrado e interesante y han logrado adelantar vivencias que los estudiantes deberán enfrentar más adelante en el mundo del trabajo”, argumenta Sandoval.
Próxima etapa
En una semana más, Juan Sandoval entregará su actual cargo a su colega en la Escuela de Psicología Gonzalo Lira, quien resultó electo como segundo decano tras la votación del claustro de la Facultad realizada hace un mes.
Lira será el encargado de conducir a esta unidad académica de poco más de mil cien estudiantes hacia la segunda etapa del proceso iniciado en 2019: el de la consolidación y la expansión.
“Al profesor Lira le deseo lo mejor. Estoy seguro de que representará un liderazgo muy nutritivo para la Facultad y aportará de manera decidida a la consolidación de la asociatividad interna y a su despliegue externo, con el fin de que pueda incidir en el debate público, en temas relevantes y en los que se requiere una cierta visión y un discurso que, si esta Facultad no los propone, nadie lo va a hacer”, sentencia.
Una vez que entregue la posta a su sucesor, Sandoval confiesa que se tomará unos días de descanso, luego de lo cual retomará de lleno sus labores docentes y de investigación en el campo de la psicología social.
“Pienso darme el tiempo para escribir sobre varios asuntos pendientes, que es algo que desde que asumí como decano no he podido hacer. La idea es también avanzar en el desarrollo de proyectos asociativos. En fin, tendré harto que hacer, ya que por cierto ahora no sólo regreso a la Escuela de Psicología sino también a la Facultad de Ciencias Sociales”, concluye.
Fotos: Denis Isla / Nota: Gonzalo Battocchio